sábado, 7 de marzo de 2015

El tratamiento no farmacológico en el alzhéimer

Tal y como señala un reciente estudio publicado en el British Medical Journal, los enfoques no farmacológicos deben ser la primera opción para el tratamiento de los síntomas comunes de demencia de los pacientes, tales como irritabilidad, depresión, ansiedad, apatía, problemas de sueño, agresividad y delirios.

Los investigadores, de la Universidad de Michigan Medical School y la Universidad Johns Hopkins, realizaron su trabajo a lo largo de dos décadas sobre los antipsicóticos y antidepresivos y los enfoques no farmacológicos que ayudan a los cuidadores a abordar los problemas de comportamiento de los pacientes.

Para Helen C.Kales, jefa del Programa de UM para el Envejecimiento Positivo de la Universidad de Michigan y principal autora de la investigación, la evidencia medica del tratamiento no farmacológico ante los problemas de conducta que a menudo se ven en la demencia, es superior a la evidencia de los antipsicóticos, y mucho mejor que en otras categorías de medicamentos. "El tema y el reto es que nuestro sistema de salud no ha incentivado la formación en las alternativas al consumo de fármacos , y hay poca investigación de los métodos basados ​​en los cuidadores", asegura la investigadora.
Ella y sus colegas de la Universidad Johns Hopkins, consideran necesario que haya un cambio de recursos y se adopte un enfoque más proactivo de los cuidadores y familiares, aunque recuerda que los fármacos tienen su lugar, especialmente para la gestión de situaciones agudas en las que la seguridad de la persona con demencia o cuidador familiar puede estar en riesgo. Por ejemplo, los antidepresivos tienen sentido para los pacientes con demencia con depresión grave, y los antipsicóticos deben ser utilizados cuando el paciente tiene una psicosis o agresividad que podría desembocar en un daño a sí mismo o a otros. Pero estos usos deben ser estrechamente vigilados por el medico y finalizados lo antes posible.

Los autores trazan cinco categorías no farmacológicas, demostrando que estos enfoques pueden ayudar a reducir los problemas de conducta:

                    Proporcionar formación al cuidador principal 

                   Mejora de la comunicación efectiva entre el cuidador y la persona con demencia

                   Creación de actividades significativas para la persona con demencia

                   La simplificación de tareas y el establecimiento de rutinas estructuradas

                   Garantizar la seguridad y mejora del entorno del paciente

Simultáneamente, un nuevo informe de la Oficina de Responsabilidad Gubernamental de Estados Unidos (GAO) ha abordado la cuestión del uso excesivo de la medicación antipsicótica para los problemas de conducta en pacientes con demencias. En él se estima que en 2012, a un tercio de los adultos mayores con demencia cuya estancia en residencia superaba los cien días, se les prescribió un medicamento antipsicótico y que alrededor del 14 por ciento de los ancianos que residen en sus hogares, se les prescribió un antipsicótico ese mismo año. Los expertos observaron que los fármacos antipsicóticos a menudo se inician en el ámbito hospitalario y prorrogados cuando los adultos mayores son ingresados en una residencia. Además, la investigación concluye  que los bajos niveles de personal, dan lugar a un mayor uso de fármacos antipsicóticos e insta a que los esfuerzos educativos se extiendan a los cuidadores y familiares de los enfermos que se encuentran en sus hogares.  

viernes, 6 de marzo de 2015

La gota podria proteger del alzhéimer

Según un estudio publicado recientemente en la revista Annals Of The Rheumatic Diseases, las personas que padecen gota, una enfermedad producida por acumulación de cristales de urato monosódico en distintas partes del cuerpo, sobre todo en las articulaciones inferiores, tejidos blandos y riñones, tienen menos riesgos de sufrir alzhéimer. La investigación, llevada a cabo por especialistas del centro de reumatología, alergias e inmunología del Hospital General de Massachusetts y del Centro Médico de la Universidad de Boston, en Estados Unidos y que fue analizada en el Reino Unido, sugiere que la gota tiene efectos protectores para el cerebro. Los expertos sostienen que ello se debería a un exceso de ácido úrico acumulado durante los ataques de esta enfermedad milenaria conocida como la de los reyes debido a que era frecuente entre los emperadores romanos y la sufrieron  Enrique VIII y  Felipe II, todos ellos con  una dieta excesiva de alimentos ricos en purinas, como las carnes rojas, vísceras, pescado azul o mariscos y alcohol.

El trabajo investigador, que utilizó una base de datos sanitaria informatizada de Reino Unido con 3,7 millones de personas mayores de 40 años, se realizó comparando los adultos con gota con un máximo de cinco personas sin gota emparejados por edad, fecha de inicio del estudio, año de inscripción y el índice de masa corporal (IMC), Los participantes fueron seguidos hasta que desarrollaron  alzhéimer, murieron, salieron de la base de datos o terminó el seguimiento. 

Los investigadores identificaron 309 nuevos casos de alzhéimer entre 59.224 pacientes con gota (edad media de 65 años) y 1.942 casos entre 238.805 personas en el grupo de comparación durante un promedio de cinco años de seguimiento. De esta forma, vieron que había un 24 por ciento menos de riesgo de  alzhéimer entre los individuos con antecedentes de gota, por lo que concluyen que esta investigación  apoya el papel neuroprotector del ácido úrico.

miércoles, 25 de febrero de 2015

Una prueba cutánea podría diagnosticar el alzhéimer

Investigadores mexicanos han descubierto un test cutáneo que podría recabar más información sobre algunas enfermedades neurológicas como el alzhéimer o el Parkinson, según señala un estudio que se presentará en la 67 reunión anual de la Academia Americana de Neurología, a celebrar del 18 al 25 de abril en Washington. El trabajo muestra que las biopsias de piel se pueden utilizar para detectar niveles elevados de proteínas anormales que se encuentran en las dos enfermedades.

Para el estudio, los científicos tomaron biopsias de piel de 20 personas con alzhéimer, 16 con Parkinson y 17 con demencia causada por otras enfermedades y las compararon con 12 personas sanas de la misma edad. En comparación con los pacientes sanos y aquellos con demencia causados por otros factores, los que tenían tanto alzhéimer como Parkinson poseían niveles siete veces más altos de la proteína tau

Las personas con Parkinson también presentaban niveles ocho veces más altos de la proteína alfa-sinucleína que el grupo sano de control. Según el director del estudio, el Dr.Ildefonso Rodríguez Leyva, del Hospital Central de la Universidad de San Luis Potosi en México. "Nuestra hipótesis es que  como la piel tiene el mismo origen que el tejido cerebral en el embrión, también podrían detectarse en ella las mismas proteínas anormales. Ésta nueva prueba ofrece un biomarcador potencial que puede permitir a los médicos identificar y diagnosticar estas enfermedades mucho antes de que se manifiesten ".

jueves, 12 de febrero de 2015

Insulina para el tratamiento del alzhéimer



Una investigación dirigida por la Dra. Suzanne Craft, gerontóloga de la Universidad estadounidense de  Wake Forest,  ha vuelto a demostrar que la utilización de la insulina inhalada podría ser eficaz para mejorar el deterioro cognitivo de los enfermos de alzhéimer.
Desde 2011, otros estudios ya revelaron  que la insulina mejoraba la memoria en pacientes con enfermedad de Alzheimer y otras formas de deterioro cognitivo.

En este nuevo estudio, publicado en el Journal  of Alzheimer' Disease los participantes recibieron 20 o 40 unidades insulina detemir, una forma de fabricación de insulina que proporciona efectos más duraderos, en comparación con la insulina “regular”.

Durante 21 días, a 60 adultos que habían sido diagnosticados de DCL o de enfermedad de Alzheimer en estado leve o moderado , se les suministraron  20 UI de un placebo, o 20 o 40 UI de insulina detemir  por vía nasal.
Los hallazgos del estudio han revelado que los participantes que recibieron 40 UI de insulina detemir mostraron una mejoría importante en su memoria de trabajo – la capacidad de retener y procesar nueva información – en comparación con los participantes que recibieron 20 UI de insulina detemir o el placebo. Además, los participantes que recibieron 40 UI de insulina detemir y portadores de APOE-e4  daban  mayores puntuaciones en pruebas de memoria que los participantes que recibieron la dosis de insulina detemir inferior o el placebo. Los participantes que no tenían el gen tenían puntuaciones más bajas de memoria, independientemente de si recibieron una dosis de 20 o 40 UI de insulina detemir o el placebo.

En la evaluación de la seguridad de la pulverización insulina detemir entre los participantes, se observo  que solo  provocó efectos secundarios menores. El equipo concluye que restaurar la función normal de la insulina en el cerebro puede conllevar importantes beneficios terapéuticos a las personas con alzhéimer pero tambien señalan que es necesaria más investigación para estudiar los mecanismos que subyacen a la asociación entre la administración de la insulina detemir y la mejora de la memoria en las personas con el gen APOE-e4.

martes, 3 de febrero de 2015

El 40% de los enfermos de alzhéimer no sigue correctamente la prescripción farmacológica

Según el estudio presentado ayer en el Colegio Oficial de Farmacéuticos de León y llevado a cabo por esta institución colegial “el 40 por ciento de los enfermos de alzhéimer tiene problemas con su medicación”.
El autor del informe, vocal de Pacientes del Colegio de Farmacéuticos, Joaquín Carrasco Fernandez, ha explicado además que, en el caso del alzhéimer, se produce uno de los porcentajes más altos de abandono de los medicamentos, debido al elevado precio del tratamiento, aunque en los últimos años el coste de los fármacos ha descendido considerablemente por la aparición de los genéricos, un paciente puede llegar a desembolsar anualmente entre 20.000 y 25.000 euros en atención directa.



El estudio, realizado mediante una encuesta a los cuidadores de 387 enfermos de alzheimer de los centros de la provincia de León,  revela otros datos que llaman la atención, como que el 7,10% de los encuestados asegura que se enfrenta a problemas antes incluso de administrar los medicamentos, sobre todo con causas relacionadas con las dificultades para abrir los envases o para interpretar las medidas de las dosis que se requieren.

Carrasco calificó  como "alarmante" esta situación, refiriéndose a otros factores  que también influyen, en menor medida, como los descuidos, el temor a la aparición de efectos secundarios o, incluso, el hecho de pensar que las medicinas, en el caso de los pacientes de alzhéimer, no aportan resultados.

La investigación se ha realizado con la colaboración de la asociación Alzheimer León y otros centros asistenciales y colectivos de familiares de enfermos de la provincia y, aunque existen estudios anteriores sobre la desafección de los fármacos de esta patología, ninguno de ellos había abordado antes las causas. 
Tras reclutar a un total de 387 pacientes, un 26,3 por ciento de los cuidadores cuestionados indicó que estos problemas con la medicación se deben a que el paciente rechaza directamente los fármacos, algo que achacan a “la propia presentación de los medicamentos, teniendo problemas con su ingesta puesto que se trata de pastillas de gran tamaño y son enfermos con dificultades para tragar”, l
Otro motivo que justificaría el abandono de la medicación es la sobrecarga de trabajo de los cuidadores, algo que fue alegado por el 11 por ciento de los entrevistados. Tras ello se sitúan otras causas, como el ajuste de las dosis en función de las necesidades del paciente (6%) y la propia dosificación del fármaco (5%).
Por su parte, la directora gerente de Alzheimer León, Flor de Juan, manifestó  que  "los medicamentos  son muy caros y  el 10% de la aportación por el copago es una de las más altas».insistiendo, además, en  la importancia tanto de las asociaciones de pacientes como de los profesionales sanitarios para asesorar y orientar en el entorno familiar del enfermo.

martes, 27 de enero de 2015

Investigadores españoles logran un avance en el diagnostico precoz del alzhéimer


Un grupo de investigadores del Instituto de Neurociencias de Alicante , centro mixto de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha publicado en la edición digital de la revista Molecular Neurodegeneration un estudio en el que se investiga la validación de nuevos biomarcadores para el diagnóstico clínico de la enfermedad del alzhéimer.
Según el trabajo dirigido por el Dr. Javier Sáez Valero, se han identificado la proteína precursora amiloide, en su forma completa sin procesar, en el líquido cefalorraquídeo. Esta forma completa de la proteína coexiste en el líquido cefalorraquídeo con fragmentos de la misma que habían sido propuestos como marcadores diagnósticos.



Para el Dr.  Sáez Valero, asi como para Inmaculada Cuchillo e Inmaculada López Fuentes, autoras principales del estudio, es destacable este hallazgo porque abre la posibilidad de diseñar nuevos test aplicables en el diagnóstico temprano y en ensayos clínicos, que permitan realmente estimar el valor de las proteínas amiloides como biomarcador para el alzhéimer.



El grupo de investigación de Sáez Valero, también, pertenece al Centro de Investigación Biomédica en Red sobre Enfermedades Neurodegenerativas (CIBERNED), una iniciativa del Instituto de Salud Carlos III para mejorar en la lucha contra las enfermedades neurodegenerativas y neurológicas. Sáez Valero considera que este trabajo ha sido posible gracias a la colaboración de muchos otros investigadores,contándose con la colaboración del neurólogo del Hospital Clínic de Barcelona José Luis Molinuevo y de los investigadores del Departamento de Psiquiatría y Neuroquímica de la Universidad  sueca de Gotemburgo, Gunnar Brinkmalm y Kaj Blennow.

viernes, 23 de enero de 2015

La hibernación animal, una pista para tratar el alzhéimer

Según  un estudio publicado en el ultimo número online de la revista Nature, una proteína asociada al frío extremo recompone las sinapsis y frena la muerte de las neuronas en ratones con alzhéimer.
Es sabido que algunos  mamíferos, como los osos, experimentan una drástica caída de su temperatura corporal durante la hibernación. Para ahorrar recursos, muchas sinapsis desaparecen. Llegada la primavera, estos animales crean nuevas conexiones y no pierden memoria. Es un ejercicio de regeneración que obsesiona a muchos científicos que buscan un remedio contra los efectos del alzhéimer y otras dolencias caracterizadas por la pérdida de estas conexiones neuronales.

Ahora, tal y como señala la investigación publicada en Nature, los  investigadores británicos han forzado la hibernación en ratones y han descubierto una proteína  que parece ser fundamental para ese efecto reparador. Sus efectos ayudan incluso a evitar la muerte neuronal cuando los animales sufren daños similares a los del alzhéimer. 
Un golpe de hipotermia de 45 minutos a unos 16 grados de temperatura bastó para que los ratones perdieran buena parte de sus sinapsis en el hipocampo, uno de los epicentros cerebrales de la memoria. Al recobrar la temperatura normal, los ratones más jóvenes recobraron sus conexiones entre neuronas. Los investigadores consideran que parte de la explicación se debe a  que dicha proteína llamada RBM3- previamente relacionada con la prevención de la muerte neuronal- multiplica sus niveles por el frío en los individuos jóvenes pero no tanto en los mayores.
El trabajo ha sido muy bien acogido por expertos independientes por las posibilidades que abre de cara a la investigación de la regeneración cerebral, aunque son muy  cautos sobre su aplicación terapéutica.
Giovanna  Mallucci, directora de la investigación ha declarado: "Hemos sabido durante algún tiempo que el enfriamiento puede retrasar o incluso prevenir el daño a las células cerebrales, pero la reducción de la temperatura corporal no suele ser factible en la práctica: es desagradable e implica riesgos como neumonía y coágulos de sangre. Pero, al identificar la refrigeración activa como  un proceso que evita la pérdida de células del cerebro, ahora podemos trabajar para encontrar un medio para desarrollar fármacos que pueden imitar los efectos protectores de frío en el cerebro ".